Olor a libro

Queridos lectores: ¿son como yo que prefieren el olor a los libros nuevos? He intentado leer en tableta o en el celular, pero siempre fracaso, pues nada se compara con tener el escrito en mis manos para sumergirme en él…

Mi madre le preguntó a mi hermana pequeña lo que quería de cumpleaños. Ella sin dudar dijo que un libro. Todos nos quedamos viendo, ya que hace mucho que esos objetos habían sido prohibidos en el país por el desperdicio de hojas que implicaba, así que ahora todo estaban en digital.

Mi mamá se me quedó viendo suplicante y yo le dije a Mar que le podríamos comprar uno electrónico, como los que ya tenía. Ella se negó y salió corriendo a su habitación. Yo la seguí y vi como lágrimas pequeñas corrían por sus ojos.

-Paty me dijo que el olor a libro nuevo no se compara con nada y yo quiero saber a qué huelen, aunque sea una vez. Por favor, por favor.

-¿Y cómo es que Paty tiene un libro? Sabes que eso es ilegal hoy en día.

-Me dijo que su abuelo tenía una biblioteca en el sótano de su casa y que cada domingo va con él. Dice que olerlos es experimentar el pasado en el presente.

-Haré lo posible con conseguirte uno, lo prometo -Digo mientras la dejo sola en su habitación.

Después voy a mi escondite y con todo el amor que le tengo a mi hermana, agarro el único libro que pude salvar. Tenía planeado guardarlo para mí, pero creo que ella lo necesita más que yo.

Llega el día de su cumpleaños y se lo regalo, sin que nadie se enteré. Su sonrisa hace que deshacerme de mi mayor tesoro valga la pena. Ella me abraza y jura protegerlo con su vida. Después, lo olfatea, como si no hubiera olor más hermoso en toda la faz de la tierra y yo comprendo que a veces es mejor dejar ir las cosas, para que hagan feliz a alguien más.

Anne Kayve

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