Queridos lectores: siempre me es posible perderme en una librería y, siendo sincera, ya extrañaba esa sensación.
Ale y Dan, como primera cita, decidieron ir a una cafetería que al mismo tiempo era una librería. Estaban emocionados porque ambos amaban los libros. Sin embargo, también estaban nerviosos porque se sentían atraídos mutuamente. Así que cuando se vieron, descubrieron el amor en los ojos del otro, pues compartían algo que no todas las personas aman: la lectura y los mundos creados por escritores extraordinarios.
Anne Kayve
es peligroso entrar a una librería…no sabes que nuevos mundos te esperan entre las páginas de sus habitantes…besos al vacío desde el vacío
Me gustaLe gusta a 1 persona
Exacto… y casi nunca puedo evitar la tentación
Me gustaLe gusta a 1 persona