Cargando Apocalipsis

Queridos lectores: creo firmemente que lo peor que nos puede pasar (o al menos a mí que soy una persona muy impaciente) es tener que esperar. Ya sea para los resultados de un examen importante, para ver si nos quedamos en cierta escuela o si nos aceptaron en nuestro trabajo soñado. O como estamos justo en este momento: esperando la apocalipsis. Creo que no me queda más que seguir esperando y escribir sobre ello. Gracias por seguir aquí.

Al ver que los resultados de mi aceptación de la universidad salen negativos, me frustro tanto conmigo mismo que golpeo la computadora, lo cual provoca, para mi terror, que aparezca un anuncio extraño. Me tallo los ojos para asegurarme de que no estoy teniendo una pesadilla, pero la ventana que se abrió es real y muestra que el apocalipsis se está cargando.

Horrorizado trato de apagar la computadora, pero se ha trabado, lo cual aumenta mis nervios. A tal punto que la aviento hacia la pared. Al escuchar el ruido, mi perro empieza a aullar, otra mala señal de que todo es real. Me acerco para levantarla y me doy cuenta que la pantalla no se ha apagado y que sigue avanzando la barra.

Una sirena, la que nos avisa que hay un terremoto cerca, empieza a sonar y yo cargo a Daly y la llevo conmigo. Debemos salir antes de que empiece la desgracia. Sin embargo, el temblor me agarra bajando de las escaleras. Estoy pensando que voy a morir. No obstante, no pasa. Sin poder creerlo, salgo a la calle y me doy cuenta que todos salieron ilesos. Aunque me doy cuenta que todos estamos destrozados emocionalmente.

A lo mejor el apocalipsis es peor que la muerte, sólo a lo mejor.

Anne Kayvve

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay